"Cómo nació mi marca de playeras: una historia de ideas, miedos y ganas de crear"

"Cómo nació mi marca de playeras: una historia de ideas, miedos y ganas de crear"

Todos tenemos una historia que contar, y detrás de cada marca hay un camino que rara vez se ve en redes sociales. Emprender no solo es diseñar un logo o vender un producto, es también enfrentarse a dudas, tomar decisiones difíciles y, sobre todo, creer en algo que aún no existe.

Hoy quiero compartir cómo nació mi marca de playeras, DULA, no solo para contar mi historia, sino porque tal vez tú también estés en ese punto donde una idea te ronda la cabeza y no sabes si dar el salto.

Todo comenzó con una inquietud: Crear algo. No tenía claro qué, pero quería crear.

Pensando más mi idea y sin querer soltarla, pensé en tener una tienda de ropa. Pero al revisar costos vi que el presupuesto que tenía era nada para poder iniciar. Así que, fui mas realista y me quedo claro que si quería empezar, debía hacerlo con lo que ya tenía. Y de pronto pensé, "puedo hacer playeras". Y así empecé a investigar que se necesitaba, cómo se hacía, etc. En ese momento no pensaba en un negocio,mi idea era más clara y sabia que si quería crear algo, era necesario que tuviera sentido para mí. Algo auténtico.

Investigar proveedores, aprender sobre serigrafía, hacer pruebas, fallar, volver a intentar… así fueron mis primeros meses.

No todo fue fácil. Recuerdo que una vez que compre los primeros insumos me puse a practicar viendo vídeos en youtube, como si fueran tutoriales, iba pausando el video para hacer lo que acababa de ver. Repetía los emulsionados, me daba miedo imprimir, sudaba (literal), me tardaba un día completo registrando... decía: "la serigrafía huele mi miedo".

La parte más importante (y también la más difícil) fue entender qué quería transmitir con mi marca. No quería vender solo playeras; quería contar historias, crear algo con identidad. Aunque en un inicio fue complicado encontrar el concepto de DULA, por que inicie imprimiendo diseños de caricaturas de los 90´s. Aclarando que fue antes de que grandes marcas como Bershka o Pull n Bear hicieran lo mismo.

Cuando empezó a popularizarse hacer diseños que traían la nostalgia de nuestra infancia, me di cuenta que era un camino que no quería continuar por dos razones: 1. Ya no era una idea original y 2. por qué ya no conectaba con lo que estaba creando, solo era vender por vender.

Paso el tiempo, tuve bajones emocionales que me hacian replantearme muchas cosas, hasta el hecho de seguir con la marca. Pero encontré refugio en la lectura de autores como Napoleón Hill, Brian Tracy, Joe Dispenza y Bob Proctor. Los use como guías para poder reestablecer que quería proyectar con mi marca. Por que, si bien, había pensado en dejar el proyecto, la realidad era que me sentía muy decepcionada conmigo misma de no sentirme segura y querer experimentar algo nuevo y no comercial. Tan solo pensar en ¿qué pasaría si dejará el proyecto? traía a mi mente imágenes de mi siendo infeliz, sentir impotencia al decir "yo algún tiempo tuve mi marca y había personas que me compraban, o sea, la idea tomo forma y se volvió real, pero ya no seguí". No me sentía a gusto al saber que si dejaba todo, en algún momento me iba a arrepentir e iba a decir "que mensa, hubiera seguido"... Creo que hasta recordar la primer venta que me hizo creer en mi proyecto cambió todo. Fue una señal de que valía la pena seguir.

Así después de 4 años nació el concepto de imprimir playeras con mensajes que te empoderarán cada que las uses. Crear un espacio positivo y que aporta a reforzar que somos capaces de lograr cualquier cosa que tengamos en mente, que el límite nos lo ponemos nosotros mismos y que vale la pena disfrutar el aquí y el ahora. Acompañando el diseño con ilustraciones o tipografías que acompañen el mensaje.

Emprender es un camino largo y cambiante. A veces se avanza rápido, a veces toca detenerse y repensar.

Lo que sí sé es que si tienes una idea, debes intentar. Equivocarte, sí. Aprender, también. Pero sobre todo, atreverte.

Hoy DULA sigue creciendo, y me emociona pensar en todo lo que falta por crear, pero más me emociona saber que me lees y que sigues en el camino conmigo.

Si tú también estás pensando en iniciar un proyecto creativo, espero que mi historia te inspire a dar ese primer paso.

Me encantaría saber si te pasó algo similar o si tienes una marca en camino. Puedes escribirme o dejar tu historia en los comentarios :).

Con cariño, Erika <3 :)

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